viernes, 11 de marzo de 2016

Piloto de drones, una profesión de futuro

La popularización de estas aeronaves ha hecho del piloto de drones, una profesión de futuro. 


Piloto de drones, una profesión de futuro en el mercado laboral.


La rigidez de la legislación y la necesidad de trabajar bajo el paraguas de una operadora, los principales frenos para que los piloto de drones, una profesión de futuro sean una industria que, en una década, según cálculos de la Comisión Europea, moverá alrededor de 15.000 millones de euros.

Piloto de drones, una profesión de futuro
Piloto de drones, una profesión de futuro
El creciente desarrollo de soluciones dron en el ámbito civil está propiciando que muchas empresas incorporen estas aeronaves a su actividad, con la consiguiente necesidad de captar a profesionales cualificados que cuenten con la formación necesaria para manipularlos. Ya sea para uso recreativo o profesional, el empleo de estas aeronaves se ha multiplicado en los últimos años lo que convierte al piloto de drones en una salida laboral a tener en cuenta en el futuro.

PILOTO DE DRONES, UNA PROFESIÓN DE FUTURO. SEGÚN LOS CÁLCULOS DE LA COMISIÓN EUROPEA, LA INDUSTRIA DE DRONES MOVERÁ 15.000 MILLONES DE EUROS Y GENERARÁ 250.000 EMPLEOS.  

"El sector se empieza a profesionalizar en 2014 con la entrada de la legislación. En ese momento éramos unas 20 empresas y ahora mismo hay más de 1.000", explica Jaime Guillot, director ejecutivo de Drone Spain, una de las operadoras españolas más grandes del mercado. A su juicio, la gran acogida que han tenido estos aparatos entre el público -sólo en Estados Unidos se estima que se han comercializado alrededor de 400.000 durante la campaña navideña- ha ayudado a que la sociedad tome conciencia de la verdadera realidad de los drones y a ver que, piloto de drones, una profesión de futuro, es una opción mas en el mercado laboral. 

En ocasiones se olvida que el regalo estrella de las pasadas navidades no es un juguete y que es necesario acreditar con un título la destreza del piloto, así como cumplir con una exigente regulación que contempla multas de hasta 250.000 euros en caso de infracciones muy graves.

CENTROS ATO, LAS AUTOESCUELAS AÉREAS


En España, los pilotos de drones se rigen por una normativa vigente desde julio de 2014 y un órgano regulador, la AESA (Agencia Española de Seguridad Aérea), encargado de velar por la seguridad y profesionalidad de todos los que manejan aeronaves no tripuladas de hasta 150 kg. El primer paso para convertirse en piloto profesional de drones es superar un curso homologado por la AESA en el que los candidatos se someten a una prueba teórica, una práctica y un examen médico, cuyos requisitos son muy similares a los que ha de pasar un piloto de una aerolínea comercial.

Estos cursos se imparten únicamente en los centros ATO, una suerte de autoescuelas aéreas donde se consigue la licencia para volar, y que en España, según los datos de la AESA, ascienden a 58. En este sentido, los expertos recomiendan a los futuros pilotos que se aseguren de que los centros cuentan con todas las garantías legales ya que, con la popularización de los drones, han surgido un buen número de escuelas pirata que no aseguran la titulación oficial a sus alumnos.

Aunque resulta paradójico, una vez que el piloto se saca la licencia no puede hacer volar drones. Para ello, explica Guillot, es necesario "estar bajo el paraguas de una operadora". De este modo, el futuro para estos nuevos profesionales del aire pasa, en la mayoría de los casos, por montar su propia operadora debido al escaso número de compañías que trabajan con drones en la actualidad.

La lista de tareas para la que se pueden emplear los drones es amplia y va en aumento. Desde la revisión y mantenimiento de estructuras, edificios o tendidos eléctricos, pasando por la fotografía y la grabación de imágenes, hasta la fumigación de cultivos, la vigilancia de terrenos o el control de fronteras. Sin embargo, la restrictiva regulación a la que está sujeta el sector ensombrece las perspectivas de consolidarse en el corto plazo como una industria puntera y generadora de empleo. "Va a haber una travesía por el desierto hasta que la regulación cambie, y esto no pasará hasta que los fabricantes aseguren la total fiabilidad de los drones", concluye el director ejecutivo de Drone Spain.

ESTOS SON LOS REQUISITOS PARA CONVERTIRSE EN PILOTO DE DRONES


1. Curso teórico. Todos aquellos interesados en convertirse en pilotos de drones deberán superar, en primer lugar, un curso teórico de 60 horas de duración que sólo puede ser impartido en los centros ATO, homologados por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).

2. Curso práctico. Además de las centros ATO, únicamente existen un puñado de empresas autorizadas para impartirlos. Para superar esta prueba, el alumno debe demostrar su destreza con la aeronave en un examen, tras cuatro horas de lecciones prácticas.

3. Certificado médico. Se trata de un certificado médico de clase 2, similar al que se hace a cualquier piloto de aviación comercial. Incluye pruebas de orina, sangre, diabetes y daltonismo, entre otras.

domingo, 6 de marzo de 2016

La primera liga mundial de drones ya está en marcha

El funcionamiento de la liga mundial de drones es sencillo. Existen tres etapas: clasificatorias, semifinales y final.


"Hemos creado una nueva forma de entretenimiento", asegura Nicholas Horbaczewski, fundador de la Drone Racing League (DRL) o lo que es lo mismo, la liga mundial de drones, que ha celebrado hace pocas semanas su primera carrera con aeronaves no tripuladas.


Al igual que hiciera Bernie Ecclestone en la década de los 70 con la Fórmula 1, convirtiendo este deporte en un negocio global de miles de millones de dólares, Nicholas Horbaczewski quiere aprovechar los últimos avances tecnológicos para impulsar las carreras de drones hasta el punto de crear un nuevo espectáculo de masas con la primera liga mundial de drones. "Las carreras de aviones no tripulados son un pasatiempo cada vez más popular. La experiencia es tan intensa, visceral y sorprendente que creímos que habría una demanda creciente para ver las habilidades de algunos de los mejores pilotos de drones del mundo", explica a EXPANSIÓN el CEO y fundador de la Drone Racing League (DRL).

La primera liga mundial de drones ya está en marcha
La primera liga mundial de drones ya está en marcha

CONTENIDOS AUDIOVISUALES

A medio camino entre los e-sport -competiciones virtuales de videojuegos- y las retransmisiones deportivas tradicionales, la liga mundial de drones aspira a entrar en un mercado al alza en el que plataformas como Twich -que ofrece un servicio de vídeo en streaming para gamers- generaron alrededor de 3.800 millones de dólares en 2015, según datos de Superdata. "Estamos centrados en la búsqueda de lugares emblemáticos y complejos para hacer la experiencia lo más atractiva posible a los espectadores desde sus casas, así como en desarrollar tecnología que apoye la filmación", apunta Horbaczewski.

Por el momento, la start up estadounidense apuesta por generar contenidos audiovisuales para ser consumidos en los móviles y a través de plataformas como Facebook y YouTube. "No sólo estamos creando un deporte, estamos ante una nueva forma de entretenimiento", destaca el fundador de la liga mundial de drones. De cara al futuro, la compañía trabaja en alcanzar acuerdos con distribuidoras que retransmitan las carreras en directo, aunque por el momento Horbaczewski prefiere no revelar sus nombres. "Hemos tenido una fantástica acogida. En estos momentos estamos en conversaciones con patrocinadores y distribuidoras y en poco tiempo se sabrán más cosas", asegura.

APETITO INVERSOR

El buen recibimiento del público se ha trasladado también al plano inversor. Millonarios como Stephen Ross, propietario de los Miami Dolphins de la NFL (Liga Nacional de Fútbol Americano) y fondos de inversión como Lerer Hippeau Ventures, ya han apostado por este futurista deporte que algunos medios en Estados Unidos se han atrevido a bautizar como el Nascar digital. En total, la DRL ha conseguido recaudar ocho millones de euros procedentes del capital riesgo.

La primera de las carreras de la liga mundial de drones tuvo lugar el pasado mes de febrero en el Sun Life Stadium, la casa de los Miami Dolphins, y para 2016 hay previstos seis eventos más. El funcionamiento de la liga es sencillo. Existen tres etapas: clasificatorias, semifinales y final. En cada una de estas fases los pilotos compiten entre sí y, en función de su destreza, van acumulando puntos que les permiten superar las diferentes rondas. "En cada carrera hay desafíos que los pilotos tendrán que salvar, como atravesar túneles, volar sobre escaleras o sortear obstáculos. En función del tiempo y de si han pasado por todos los puntos de control se otorgan los puntos", explica Horbaczewski.

Es la organización la que se encarga de desarrollar y poner a disposición de los pilotos los drones listos para volar. Los aparatos integran algunas de las últimas innovación tecnológicas que hay en el mercado: desde cámaras de última generación instaladas en las aeronaves a gafas de realidad virtual para que los pilotos las puedan dirigir de forma remota. La DRL cuenta incluso con un departamento formado por ingenieros y tecnólogos enfocados únicamente a la mejora técnica de los aparatos. Y es que si bien en los últimos años se ha extendido el empleo de aviones no tripulados en el ámbito civil y militar, su uso como vehículo de carreras es todavía una incógnita.

PILOTOS

"La liga está abierta a los mejores pilotos de todo el mundo. Contamos con profesionales de élite procedentes de multitud de países como México, Brasil o Australia, y de muy diversa edad", indica el CEO de la Drone Racing League. Y pronto serán más porque la organización rastrea Internet buscando aficionados al vuelo que hayan subido vídeos mostrando sus habilidades.

Fuente: http://bit.ly/1L74cZV